Los sentimientos no se controlan. Así de simple y contundente es la frase. Y así de cierta es. Uno no es feliz porque sí; no llora porque tiene ganas; no sufre porque está aburrido y no rie porque le conviene. Hay situaciones y diferentes motivos que nos llevan a esto.
¿Cómo no llorar cuando el Lobo gana en La Boca y a tu alrededor ves a tu hermana, dos primos, y amigos felices de contentos?
¿Cómo no estar triste si la persona que amás, no está?
¿Cómo no angustiarse si un familiar muy cercano te ignora por completo?
¿Cómo no reír cuando estoy rodeado de sobrinos?
¿Cómo no sufrir si ella sufre?
¿Cómo no sentir felicidad si papá estaba contento en su día porque estábamos todos?
Cómo no sentirme así? bien y mal a la vez y creo que todos nos sentimos así!!!
¿Cómo no llorar cuando el Lobo gana en La Boca y a tu alrededor ves a tu hermana, dos primos, y amigos felices de contentos?
¿Cómo no estar triste si la persona que amás, no está?
¿Cómo no angustiarse si un familiar muy cercano te ignora por completo?
¿Cómo no reír cuando estoy rodeado de sobrinos?
¿Cómo no sufrir si ella sufre?
¿Cómo no sentir felicidad si papá estaba contento en su día porque estábamos todos?
Cómo no sentirme así? bien y mal a la vez y creo que todos nos sentimos así!!!
Vine hasta aquí
para poder abrazarte y sentí
que ya tus brazos se niegan a ir
hacia los míos lentos.
Hoy vine hasta aquí
dejando atrás el sabor a ciudad,
y la amargura que intento cambiar
no sea mi alimento.
Y lo mejor que me pudo pasar en el viaje
fue mirar el paisaje y seguir,
fue mirar el paisaje y seguir...
Tan tonto fui,
aquella tarde me hiciste dudar,
Trabaste mi alma con tu frialdad
amor siguiendo al viento.
Y el miedo a sufrir
hoy me congela en el rancho peor
si hace frío que venga el calor
yo no quiero estar viejo.
Y lo mejor que me pudo pasar en el viaje
fue mirar el paisaje y seguir,
fue mirar el paisaje y seguir...
Y al volver
a mi querida ciudad contaré
a los amigos que un día dejé
esta aventura simple.
Voy a mentir
cuando les diga que ya superé,
que nunca hubo dolor en mi piel,
que nada tuyo existe, nena.
Desde hace muchos años que vivo para los demás –no es ninguna novedad- preocupándome por robarles una sonrisa. Perdí tiempo de mi vida que nunca más voy a recuperar por hacerle favores a gente que no sirve de nada.
Pocos me valoran como creo que realmente me tienen que valorar, y no es mucho lo que pido;
Pocos me respetan como deberían respetarme;
Pocos se acuerdan de mi, al menos que me tengan que pedir algo;
Pocos dejan todo por mí como yo lo dejo por ellos,
Pocos hoy saben cómo me siento;
Pocos, que saben cómo me siento, se preocupan por mí;
Muchos son los que se cagan y se cagaron en mí;
Muchos son los que piden pero no hacen el mínimo esfuerzo por mí;
Muchos son a los que debería mandar a la mierda y no lo hago;
Mucho son los que se quejan pero no saben nada de mí;
Por eso, me voy a dedicar un poco a mí, al menos por un rato!!!
Pocos me valoran como creo que realmente me tienen que valorar, y no es mucho lo que pido;
Pocos me respetan como deberían respetarme;
Pocos se acuerdan de mi, al menos que me tengan que pedir algo;
Pocos dejan todo por mí como yo lo dejo por ellos,
Pocos hoy saben cómo me siento;
Pocos, que saben cómo me siento, se preocupan por mí;
Muchos son los que se cagan y se cagaron en mí;
Muchos son los que piden pero no hacen el mínimo esfuerzo por mí;
Muchos son a los que debería mandar a la mierda y no lo hago;
Mucho son los que se quejan pero no saben nada de mí;
Por eso, me voy a dedicar un poco a mí, al menos por un rato!!!
Soy el unbekannt, pero debo confesar que por momentos me siento un bicho de ciudad, siempre bajando, buscando el agua, entrando en tu ciudad, para sobrevivir.
En un mundo cruel, me inculcaron con una canción de cuna, que la vida hay que disfrutarla muy despacito, que todo pasa, pero yo te diría que hubo sudestada que dejó su marca.
Se alejó el fantasma al atardecer de un verano del ’92. Llegó la civilización a mi alrededor, y que más gratificante que encontrarla en la esquina libertad.
A ver cuando valoran la vida, algo que yo siempre hice, para eso vine hasta aquí.
Un dije día basta de penas, no voy a pasarla mal por un manjar, aunque sea difícil, me dijeron no parés sino hay dientes de cordero que un buen día te comen como langostas.
Hoy, en tus labios de seda, estoy solo y en paz…
En un mundo cruel, me inculcaron con una canción de cuna, que la vida hay que disfrutarla muy despacito, que todo pasa, pero yo te diría que hubo sudestada que dejó su marca.
Se alejó el fantasma al atardecer de un verano del ’92. Llegó la civilización a mi alrededor, y que más gratificante que encontrarla en la esquina libertad.
A ver cuando valoran la vida, algo que yo siempre hice, para eso vine hasta aquí.
Un dije día basta de penas, no voy a pasarla mal por un manjar, aunque sea difícil, me dijeron no parés sino hay dientes de cordero que un buen día te comen como langostas.
Hoy, en tus labios de seda, estoy solo y en paz…
Paren todos los relojes,
Corten el teléfono,
Eviten que el perro ladre,
Silencien los pianos,
Impidan que vuelen los aviones,
Callen a los niños,
Desaparezcan las flores,
Vacíen el océano
Y limpien el fondo,
Era mi semana de trabajo
Y mi domingo de descanso,
Mi mediodía,
Mi medianoche,
Mi conversación,
Mi canción,
Ya no se necesitan las estrellas,
Saquenlás a todas,
Llevensé la luna
Y desmantelen el sol,
Pues nada volverá a ser como antes…
Corten el teléfono,
Eviten que el perro ladre,
Silencien los pianos,
Impidan que vuelen los aviones,
Callen a los niños,
Desaparezcan las flores,
Vacíen el océano
Y limpien el fondo,
Era mi semana de trabajo
Y mi domingo de descanso,
Mi mediodía,
Mi medianoche,
Mi conversación,
Mi canción,
Ya no se necesitan las estrellas,
Saquenlás a todas,
Llevensé la luna
Y desmantelen el sol,
Pues nada volverá a ser como antes…
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